Translate

martes, 28 de enero de 2014

NUEVO ORDEN MUNDIAL 56

NUEVO ORDEN MUNDIAL  56

LOS ILLUMINATI

Su "historia oficial"
Nos cuenta el historiador de religiones Serge Hutin que la "Orden de Los Iluminados" (primeramente llamados "Perfectabilistas") fue fundada en Ingolstadt (Baviera, por lo que también se les conoce como "Los Iluminados de Baviera"), el 1 de mayo de 1776 por Adam Weishaupt, joven de veintiocho años de edad que enseñaba derecho canónico en la Universidad de dicha ciudad. Weishaupt ten ía ideas de reforma social sumamente "avanzadas" y fundó dicha Orden con el fin de hacerlas triunfar.

Adam Weishaupt
Consiguió que entraran en la Sociedad numerosos francmasones que habían roto con la regla que prohibía las discusiones religiosas o pol íticas en las Logias; en su apogeo, la Orden contaba, en 1783, con seiscientos miembros sólo en Baviera y cierto número de afiliados en toda Europa. Pero,
"oficialmente", el éxito habría de ser de corta duración, según dicen sus apologistas. ¿Cuáles eran la
organización y los fines de esta sociedad secreta paramasónica?.
Grados: Los grados formaban una jerarquía de tres series sucesivas, debida a Weishaupt y a sus amigos:

1) Almáciga
     a. "Preparatorio"
     b. "Novicio"
     c. "Minerval"
     d. "Illuminatus minor"
2) Masonería
     "Simbólica":
     a. "Aprendiz"
     b. "Compañero"
     c. "Maestro"
     "Escocesa"
     d. "Illuminatus major"
     e. "Illuminatus dirigens"
3) Misterios
     "Menores"
      a. "Sacerdote"
      b. "Regente"
    "Mayores"
      c. "Mago"
      d. "Rey"
Los fines reales de la Orden eran develados poco a poco, a medida que el adepto ascendía en la jerarquía:

 1) El Illuminatus minor prestaba un juramento de obediencia absoluta a sus superiores. Se le
enseñaba que el fin de la Sociedad era hacer de toda la humanidad un solo cuerpo, gobernado por
los superiores.

 2) El Illuminatus dirigens promet ía luchar contra la superstición, la maledicencia y el despotismo, y
hacerse el campeón de la virtud, de la sabifuría y de la libertad.

3) En el grado de Sacerdote, se pon í a al candidato aún más al corriente de las doctirnas de la Orden.
En ella se decía que el mejor medio para verse libre de dirigentes inoportunos era proceder mediante
la operaci ón de una sociedad secreta que apuntara a apoderarse de todos los poderes del Estado.
Príncipes y sacerdotes debían ser exterminados. El patriotismo habría de ceder lugar al
cosmopolitismo.

4) En el grado de Mago, se predicaba el panteísmo materialista: "Dios y el mundo no son más que
uno –escribía Weishaupt–. Todas las religiones son igualmente sin fundamento, puros artificios
inventados por ambiciosos".

 5) En fin, el grado más elevado (Rey) enseñaba al adepto que todos los individuos tenían iguales
derechos, que el hombre debí a ser su propio soberano "como en el estado patriarcal, y que las
acciones habían de ser llevadas a este estado por todas las vías que a ello pueden conducir, es decir,
por medios pacíficos, si es posible; si no, por la fuerza, pues toda subordinación debía desaparecer
de la superficie de la Tierra".
Los Iluminados se designaban con seudónimos antiguos: "Espartaco", "Filón", "Catón". Además,
en su correspondencia designaban a Baviera como "Grecia", a Munich como "Atenas", etc.

Fin último perseguido por los Iluminados

El fin último de los Iluminados era nada menos, al fin y al cabo, que la Anarquía, en el sentido filosófico del término: "He propuesto — decía Weishaupt— una explicación de la Francmasonería, ventajosa desde todos los puntos de vista, por cuanto se dirige a los Cristianos de todas las confesiones, los libra gradualmente de todos los prejuicios religiosos, cultiva y ranima las virtudes de sociedad por una perspectiva de felicidad universal, completa y rápidamente realizable, en un Estado donde florecerán la libertad y la igualdad, un Estado libre de los obstáculos que la jerarquía, la clase, la riqueza, arrojan continuamente a nuestro paso... No tardará en llegar el momento en que los hombres serán dichosos y libres".
Anotemos, al pasar, que ciertos historiadores han atribuido a la Francmasonería propiamente dicha los propósitos de los Iluminados que, al contrario, trataban de confiscar la institución en provecho propio; así , B. Fabre escribe en "Un iniciado de las sociedades secretas superiores" (París, 1913), para caracterizar la finalidad de los Masones: "Nada de autoridad, así pues, nada de gobierno; nada de leyes, de modo que nada de legislador; nada de familia; nada de sociedad; no más nacionalidades; no más fronteras, no más patrias".

Disolución de la Orden

Los progresos de la Orden fueron muy grandes después de la adhesión, en 1782, de un francmasón ilustre, el barón Von Knigge, que fue jefe del círculo de Westfalia, pero Knigge se cansó pronto — dicen— de los modales autoritarios de Weishaupt y en compensación éste lo acusó de "fanatismo" y de "mojigatería", diciendo que había dejado una parte demasiado grande al elemento religioso en el ritual (principalmente por el "Festín de amor", celebrado con motivo del grado de Illuminatus dirigens, en el curso del cual "J. de N." (es decir, Jesús de Nazaret) era invocado como fundador de la Orden); por último, el barón se retiró de la sociedad que en ese momento estaba seriamente amenazada; ya en 1787 el Elector de Baviera había ordenado una investigación sobre esa Orden cuyos designios revolucionarios comenzaban a conocerse; después de la defección de Knigge cuatro afiliados, alarmados, se asustaron y fueron a revelar todo al Elector, declarando que "la Orden abjuraba del cristianismo, que se entregaba a placeres epicúreos, justificaba el suicidio, repudiaba el patriotismo y la lealtad como prejuicios de espíritus estrechos, condenaba la propiedad privada, permitía que se hiciera el mal cuando de él había de salir un bien, y en fin, colocaba los intereses de la Orden por encima de toda otra consideración". En 1785 quedó oficialmente — sólo oficialmente— disuelta: Weishaupt fue destituido de su cátedra y expulsado de Baviera, así como otros tres altos dignatarios.
¿Pero fue ese el fin?. Ya veremos que no. Además, es evidente que además de la actividad "exotérica", pública, de la sociedad, hay una profunda raigambre hermética. Sólo un no iniciado — como Serge Hutin— simplemente aceptaría ciertos "datos históricos" sin ver más allá. O, en otros términos, creer que un tal Adam Weishaupt era realmente el nombre del jefe de la orden. ¿Adam Weishaupt?. Adam que nos hace pensar, quizás no tanto en el Adán simplista del catecismo escolar sino en Adam Kadmon, el hombre universal arquetípico de la Cábala hebrea. Y Weishaupt, que significa, después de todo, "cabeza de sabio". ¿Es sólo mera casualidad o hay aqu í un mensaje?.
Como el mítico Christian Rosenkreutz, a fin de cuentas, alguien a quien se le supuso una historia, un
nacimiento, una vida, una muerte, pero eso resultó ser sólo literatura para ignaros; cualquier estudiante de Rosacrucismo sabe de la alegoría.
Con referencia a la ubicación espacio-temporal de Los Iluminados, con fechas, nombres propios y otras circunstancias. De las agrupaciones esotéricas que siguen, si se desea saber más, nada más sencillo que ir a un "buscador" cualquiera, tipear el nombre elegido y se tendrá más que abundantre información. Por lo pronto, lo que aquí deseo hacer es establecer la relación causal entre estas asociaciones, para que el lector saque sus propias conclusiones. Todas, hablan de las raíces de ese, ya tan temido, Nuevo Orden Mundial.
Posiblemente el origen de esta especulación deba remontarse a la época de la erección del Templo de Salomón, cuando el rey judío ordena a Hiram y Lamek la construcción del mismo. De Lamek volveremos a hablar después. De Hiram, ya sabemos cómo terminó: tres aprendices celosos dieron cuenta — tal vez físicamente, tal vez, simbólicamente— de su vida y, dicen sus seguidores, allí nació
la Masonería. Ciertos historiadores dicen que esto es pura leyenda y que para hallar sus fundamentos más remotos tenemos que esperar hasta el siglo XVIII (casualmente, el siglo que vio nacer la orden de Los Iluminados) pero las influencias esotéricas de hebreos y caldeos tuvieron tierra fértil entre los egipcios, de muchos de cuyos rituales también se ceba esa orden. Templarios y, siglos después, Rosacruces se dicen herederos — si unos primeros que los otros, es ahora una discusión bizantina; si la Masonería es tan remota como se atribuye, los Templarios pueden ser sus sucesores; si no lo es, muchas investigaciones reivindican para aquella la heredad de éstos últimos—
especialmente estos últimos, que nos hacen recordar el grado de "Caballero Rosacruz" tan caro en ciertas elevadas esferas masónicas. Mientras todo parece apuntar a que los Templarios tras su persecusión buscaron refugio en su "Secretum Templi" (América, donde ciertos antropólogos e historiadores los rastrean hasta el Amazonas y tal vez el propio Cono Sur sudamericano) los
Rosacruces inficionaron la Orden de Cristo (en Portugal), la de los Hospitalarios (en Francia) y el
llamado "Colegio Invisible" en Gran Bretaña, docta cofradía de sabios que luego devendría en la Real Sociedad de Ciencias de Gran Bretaña, el cual, por muy "científico" que pareciera, era sin embargo fuertemente esotérico, como que se hace eco y difunde el primer manifiesto rosacruz.
Recordemos que a esta sociedad perteneció Francis Bacon , genio enciclopédico y presunto autor de las obras de Shakespeare, cuya mansión es llamada por sus allegados "el Temple" y que sostenía en sus obras que el verdadero poder mundial estaba en manos de quienes él denominaba los tres Superiores Desconocidos, líderes de una sociedad conocida como el Templo de Salomón. La Orden de Cristo, a partir del descubrimiento "oficial" de América tuvo plena influencia en el devenir político de las nuevas colonias, no sólo portuguesas, como lo prueba la constitución en tierras americanas de la Logia de San Juan, a la que perteneciera Benjamín Franklin (creador del Gran Sello característico de los billetes de dólar) y "factótum" de la libertad de Estados Unidos en 1776, casual o causalmente, el mismo año en que queda constituida en Europa la Orden de Los Iluminados.
A Franklin, está claro, lo acompañaron 56 firmantes de la Constitución, de los cuales 53 eran masones.
Mientras tanto, en Europa, la orden de Los Iluminados tenía enorme influencia en Francia y en la
Revolución, tanta como en la misma — y en el modelo librepensador heredado después— tendrían
Danton y Lafayette quienes, como sabrán, venían de hacer algo parecido en América. Los Iluminados y la Revolución Francesa despertaron honda pasión en Italia y la constitución de los carbonarios (a la que pertenecieron el ya mencionado Mazzini y Garibaldi quien, preanunciando quizás a sus remotos descendientes espirituales, se encargó de dejar unas cuantas cuentas pendientes en Argentina; al frente de buques ingleses y franceses, allá por 1845 violentó la soberanía fluvial, bombardeó, saqueó e incendió varias ciudades argentinas y uruguayas — Gualeguaychú, Paysandú y Salto, entre otras— ) y a ellos se sumó también el general sudista norteamericano A. Pike, reconocida autoridad también de la Masonería Escosesa. Masón Pike, masón Lincoln.
¿Masones contra masones?. Pero, ¿acaso no es una táctica obvia que quienes se manejan en los cenáculos del poder aparentan enfrentamientos para sellar alianzas ocultas?. Otra vez, recuerden, Bush -Ben Laden. En Argentina podríamos citar un bananero reflejo de esa estrategia, cuando a principios de los años 70 el "montonero" Galimberti secuestra a los poderosísimos empresarios Born y en los noventa la historia los encuentra a los tres... socios en conocidos emprendimientos comerciales.
Espero que no se hayan hecho muy largo el tema , en el siguiente articulo seguimos contando esta historia con mas videos interesantes .

www.youtube.com/watch?v=D2Fwx0KCtuc
www.youtube.com/watch?v=B-gzRSAOw1w
www.youtube.com/watch?v=-LUDBXhkSeI

No hay comentarios:

Publicar un comentario